En la página web www.500foreveryoung.fiatpress.com se puede ver el segundo episodio de la serie web que celebra el 60 aniversario de Fiat 500, el icono fiel a sí mismo, pero siempre actual. Después de partir de Turín (en el primer episodio se mostró una reproducción del estudio de Dante Giacosa donde surgió el 500), hoy el “pequeño” Fiat llega al Londres de los años sesenta, a Piccadilly Circus para ser más exactos.
El interesante viaje multimedia forma parte de un plan de comunicación más amplio que se emitirá por radio, TV e Internet, así como de una serie de iniciativas que incluye un recorrido por las plazas más bellas de Europa, con fans y coleccionistas del Fiat 500 de ayer y de hoy. Un producto que también es historia, arte y estilo de vida: Fiat 500 ha recorrido un largo camino desde 1957, influyendo en la moda, en la sociedad y en los hábitos, y convirtiéndose en un auténtico icono mundial, con casi seis millones de vehículos vendidos hasta la fecha.
Pero volvamos a los fabulosos años sesenta en Londres, con el movimiento cultural “Swinging London”, cuando Piccadilly Circus era el centro de nuevas tendencias sociales, musicales y artísticas, donde podías toparte con algunas de las personas más fascinantes de la época, como John Lennon o Paul McCartney, Sean Connery o Georgie Best, John Osborne y Harold Pinter.
Es precisamente esta famosa plaza londinense la que se reproduce en el segundo episodio. En el centro, un Fiat 500 de 1965 de un rojo intenso, rodeado de monumentos, tiendas, medios de transporte, periódicos y letreros luminosos: cada uno de ellos es un hotspot que da acceso a textos, fotografías y vídeos que narran la revolución de esos años en los que el Fiat 500 estaba a punto de triunfar en todo el mundo, incluso en la lejana Tahití. Lo demuestra una curiosa fotografía tomada en 1962, al mismo tiempo y en el mismo lugar donde otro icono mundial, Marlon Brando, estaba rodando “Rebelión a bordo”.
Desde luego no son menos famosas otras dos leyendas del cine mundial, ambas presentes en la página web con dos sugerentes imágenes: estamos hablando de la fascinante Sofía Loren, ganadora del Oscar en 1962 por “Dos mujeres”, y el director Michelangelo Antonioni que en 1966 decidió plasmar el Swinging London rodando precisamente en la capital inglesa una de sus obras maestras, “Blow-Up”, ganadora de la Palma de Oro en el Festival de Cine de Cannes. Incluso hubo una estrella de cine que se volvió loca por el Fiat 500: Jack Lemmon. El actor americano, en la película de 1972 de Billy Wilder “¿Qué ocurrió entre tu padre y mi madre?” que se rodó en Ischia, se “enamoró” de su “compañero” de reparto, por supuesto un Fiat 500, que pidió a la productora que llevaran a su mansión de Beverly Hills, deduciendo los gastos de sus honorarios.
El viaje multimedia continúa. En la página de inicio, al lado del histórico Fiat 500, la inconfundible cabina roja de teléfonos de Londres, otro icono del imaginario colectivo que representa magníficamente el avance de las telecomunicaciones en aquella época. Por ejemplo, el teléfono, de objeto de élite, pasa a ser algo habitual en casi todos los hogares y también las llamadas de larga distancia, incluso internacionales, se volvieron más sencillas a partir de 1970 al no tener que pasar por centralita. Solo hay que pasar el ratón sobre el letrero luminoso para descubrir cómo la publicidad también adquirió, por aquel entonces, una dimensión global, capaz de satisfacer las necesidades de las nacientes empresas multinacionales.
Continuando con la navegación, se descubre una tienda de discos donde, a través del escaparate, puede entreverse un televisor, un invento reciente pero que muestra rápidamente su enorme potencial para romper las fronteras entre los países, además de ser testimonio de su propia época. Baste pensar en la increíble retransmisión en directo del primer alunizaje en 1969. Además, al hacer clic en el televisor se podrán ver dos vídeos del Archivo Histórico de Fiat rodados entre los años sesenta y setenta. No es difícil imaginar el emblemático Fiat 500 entre los jóvenes londinenses que pasean de Piccadilly Circus a Carnaby Street, escuchando a los Beatles y a los Rolling Stones.
Así pues, emblema de la motorización masiva de los años sesenta, el Fiat 500 se siente perfectamente a gusto cerca de un double decker, el famoso autobús de dos pisos de color rojo que, junto con la intrincada red de metro y los característicos taxis retro, permite descubrir cada rincón de la capital inglesa. En la parte superior de la página de inicio se puede ver un Boeing cruzando los cielos: después de todo, entre los años sesenta y setenta se registró la era dorada del transporte aéreo. Fue en uno de esos aviones que, el 7 de febrero de 1964, cuatro muchachos de Liverpool aterrizaron en el aeropuerto JFK de Nueva York, recién renombrado tras el asesinato del presidente, dando inicio oficialmente a la Beatlemanía. También se muestran algunos Fiat 500, en una sugerente imagen de esos años, esperando a ser embarcados en la pista del aeropuerto de Roma Fiumicino para ser enviados a lejanos países.
Ahora el histórico Fiat 500 es un automóvil de culto y los ingleses, desde siempre grandes coleccionistas, están listos para cometer auténticas locuras por él. ¿Un ejemplo? En 2015, la casa de subastas Sotheby’s subastó un maravilloso Fiat 500 de 1965 por 17.920 libras, mientras que la página web británica especializada Classic Driver ofreció uno de 1959 por 40.000 libras: se vendió al instante. Había sido restaurado y equipado por el famoso Graeme Hunt, una especie de dios viviente en cuestión de vehículos clásicos. Incluso el ex primer ministro británico David Cameron tenía un Fiat 500, que vendió por unos 23.000 €. ¿Por qué? Para comprar otro.
Resumiendo, el Fiat 500 es mucho más que un coche: en 60 años se ha convertido en un auténtico icono POP. Un símbolo de estilo italiano que durante décadas nunca ha pasado de moda. Con el paso del tiempo ha conquistado a todos los amantes de la belleza y la originalidad. Colorear el día a día y las carreteras de todo el mundo es la misión que el Fiat 500 lleva a cabo a diario, desde 1957: el icono Fiat es una auténtica obra de arte que enriquece el entorno que lo rodea. Así es como surge un icono mundial que afronta su 60 cumpleaños con la misma pasión y desenfado que los jóvenes que dieron vida al Swinging London.
Fiat 500 realmente es Forever Young.
Después de Turín y Londres, el pequeño gran vehículo partirá hacia el tercer episodio de la serie web, que ofrecerá, a principios de cada mes, un nuevo lugar para narrar un período histórico en el que el modelo vivió como protagonista.
La historia continúa.