La fábrica de Nissan Ávila comienza su transformación con una inversión de 40 millones de euros de la Alianza Renault Nissan Mitsubishi y el objetivo de estar ensamblando 80.000 piezas al mes en seis años. La instalación deja de fabricar camiones NT-400 en septiembre de 2019 y pasará a ensamblar recambios para todas las marcas de la Alianza.
Esperan que esté en funcionamiento en el primer trimestre de 2020. Junto con esta nave, que tendrá unos 23.000 metros cuadrados construidos, se levantará también una nave de distribución y logística con otros 70.000 metros cuadrados de construcción. De este modo, Ávila se convertirá en un «centro único de fabricación y distribución de piezas de recambio para Renault Nissan y Mitsubishi para toda Europa, apoyado en la fuerza del polo industrial que suponen las tres fábricas en Castilla y León: Renault Valladolid, Palencia y Ávila», destacó de los Mozos.
Ambas naves cuentan con la inversión de la Junta de Castilla y León. El presidente, Juan Antonio Herrera, señaló que se van a invertir 50 millones en ambas edificaciones «que supondrán un aliciente para la construcción y desarrollo de un parque logístico para empresas del sector de componentes de la automoción en Ávila». «Nuestro proyecto industrial y nuestra apuesta por el empleo es prioritaria, no podemos dar un paso atrás», explicó Herrera.
La nueva planta de estampación, que estará anexa a las actuales instalaciones de la firma, producirá piezas para todas las marcas de la compañía. Su proceso de fabricación estará dividido en cuatro fases: estampación mecánica, soldado de los componentes, pintado y embalaje.
Por su parte, la segunda nave estará dedicada a la actividad logística y en ella se almacenarán y distribuirán las piezas a toda Europa.
Las nuevas instalaciones integrarán a Ávila en el Polo Industrial de Castilla y León de la alianza y evitarán el cierre de la fábrica tras el cese de la producción del camión NT-400 en septiembre de 2019. De esta manera, «antes» de 2024 se empleará a entre 470 y 480 personas.
